La mujer ideal es, realmente, la otra. Alteridades femeninas y relato (histórico)

Producción científica: Contribución a una revistaArtículoInvestigaciónrevisión exhaustiva

Resumen

La alteridad en sí no es buena, ni es mala. Depende del uso que le dé quien la aplique. El mal no está en el instrumento, sino en quien lo maneja. Solo la educación apropiada (no todos los adiestramientos valen, porque los hay que son igual de peligrosos que un puñal éticamente mal empleado) puede iluminar la cara oscura de la alteridad. Y ello porque capacita a los seres humanos para interpretar al mundo bajo el prisma de la decodificación racional de los hechos que en él acontecen.
Idioma originalEspañol
PublicacióneHumanista. Journal of Iberian Studies
Volumen57
EstadoPublicada - 2024

Citar esto