Abstract
El manejo de la alimentación puede llegar a ser tanto o más importante que el hecho de proporcionar piensos con un determinado valor nutritivo o unas determinadas características. Las necesidades en energía y nutrientes se incrementan a medida que avanza la gestación siendo especialmente importantes en el último trimestre, debido al rápido crecimiento fetal. Este cambio de necesidades a lo largo de la gestación, así como las diferentes asociaciones detectadas entre el nivel de alimentación en diferentes estudios de la gestación y los rendimientos productivos posteriores, justifican una estrategia de alimentación por fases durante la gestación. Para que esta estrategia tenga sentido, resulta esencial disponer de sistemas de alimentación individualizada, hecho que hoy en día, se considera de gran importancia con la aparición de la nueva normativa que obliga mantener las cerdas gestantes alojadas en grupo. Tradicionalmente, la gestación se ha dividido en 3 subfases: la primera (gestación temprana) tiene una duración de unas tres semanas y en ella tiene lugar la implantación del embrión en el útero materno. La segunda fase (gestación media) es aquella en la que se prioriza la acumulación y recuperación de reservas maternas perdidas en la lactación anterior y comprende el periodo entre las tres semanas y el último mes de gestación. Durante la última fase (gestación tardía), que coincide con los últimos 30-35 días de gestación, tiene lugar la mayor parte del crecimiento fetal y el desarrollo mamario.
Original language | Spanish |
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Pages (from-to) | 0041-44 |
Number of pages | 4 |
Journal | Formulación : revista de alimentación y nutrición |
Publication status | Published - 2007 |