Inteligencia artificial y nuevos derechos sociales (renta básica universal)

El acelerado progreso que vive la inteligencia artificial es analizado desde diversos ámbitos jurídicos, siendo el laboral el que habitualmente cobra más relevancia a causa de los cambios que se considera que en el mercado de trabajo generará la substitución por inteligencias artificiales de muchos empleos desempeñados por humanos. No es tan habitual, sin embargo, analizar los efectos que en el ámbito constitucional ha de generar el advenimiento de la inteligencia artificial. En este texto se sostiene que la masiva pérdida de empleos que producirá la incorporación de la inteligencia artificial a todas las áreas de producción llevará a que, tras un periodo de gran conflictividad social, los Gobiernos pongan en marcha diversos modelos de renta universal para sostener económicamente a millones de ciudadanos que quedarán desempleados. Se generalizarán así nuevos derechos sociales y, derivado de ello, se crearán nuevos tipos de relaciones entre los ciudadanos y el Estado y entre las empresas y el Estado. El resultado será una sociedad en la que, aun y existiendo empresas formalmente privadas y trabajadores empleados por ellas, la mayoría de la sociedad dependerá del Estado. Surgirá así un nuevo contrato social de tipo socialista.